El pasado sábado 31 de agosto, Ciudad Juárez vibró al ritmo del Sol de México, Luis Miguel, en un concierto que se convertirá en una de las noches más memorables para la frontera. El evento, inicialmente programado para el viernes 30 de agosto, tuvo que ser pospuesto debido a una intensa tormenta eléctrica que dejó empapados a cientos de fanáticos que aguardaban con ansias la llegada del ídolo. Sin embargo, la espera valió la pena, y el sábado los seguidores regresaron al Estadio Juárez Vive con más energía que nunca, dispuestos a vivir una revancha musical inolvidable.
Desde las 5 de la tarde, las puertas del estadio se abrieron para recibir a miles de fanáticos que, con entusiasmo renovado, comenzaron a formar largas filas para ingresar al recinto. Muchos aprovecharon para adquirir mercancía oficial y, en los alrededores, la oferta de productos “similares” también atrajo la atención de los asistentes.
A las 8:02 en punto, tras nueve años de ausencia y un día extra de espera, Luis Miguel hizo su aparición en el escenario con el tema "Será que no me amas". El estadio estalló en una ensordecedora ovación, dando inicio a una velada donde el cantante dejó claro por qué sigue siendo una de las máximas figuras de la música en español.
Acompañado por 11 músicos y tres coristas, Luis Miguel desató una seguidilla de éxitos que mantuvieron la energía al máximo durante toda la noche. Temas como "Amor, Amor, Amor", "Suave", y "Culpable o No" hicieron que el público cantara y bailara sin cesar, mientras las luces de las pulseras repartidas entre los asistentes creaban un ambiente de fiesta que pocas veces se ha visto en la ciudad.
El momento más romántico de la noche llegó con un popurrí de baladas que incluyó "Debajo de la Mesa", "No sé tú" y "Somos Novios", en los que Luismi demostró por qué es el rey del bolero. Además, el cantante recordó sus icónicas colaboraciones, como "Sonríe" con Michael Jackson y "Come Fly With Me" junto a Frank Sinatra, que aunque proyectadas digitalmente, fueron un recordatorio del impacto global de su carrera.
No podía faltar un homenaje a las tradiciones mexicanas, y el Mariachi Vargas de Tecalitlán acompañó a Luis Miguel en interpretaciones de "La Fiesta del Mariachi", "La Bikina", y "La Media Vuelta", arrancando los aplausos más efusivos de la noche.
Cuando parecía que la velada no podía ser más intensa, llegaron los clásicos "Ahora te puedes marchar", "La chica del bikini azul", "Isabel", y "Cuando calienta el sol", que pusieron el broche de oro a una noche épica. La ovación del público fue interminable, en agradecimiento por la tremenda faena que acababan de presenciar.
Eventos de esta magnitud no llegan todos los días a Ciudad Juárez, y es motivo de celebración que, a pesar de la inclemencia del tiempo, la fiesta pudo continuar. El Sol volvió a brillar con fuerza sobre la frontera, dejando en la memoria de todos los presentes una noche que difícilmente será olvidada.
📝📷: @samxdelgado
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